Tras asumir como Presidenta de la Cámara de Representantes del 1º período de la XLVII Legislatura, Ivonne Passada, exhortó a sus colegas legisladores a comprometerse con la causa nacional, donde el Parlamento esté presente en los temas que hacen a la necesidad de los uruguayos. Profundizar los lazos regionales, ahondar el debate educativo y facilitar el acceso a la vivienda serán algunos temas a los que se priorizarán.
En su primer discurso como Presidenta del primer período de la XLVII Legislatura, la Diputada del Frente Amplio, Ivonne Passada, tuvo palabras de agradecimiento a los legisladores y ex legisladores presentes, a los integrantes del cuerpo diplomático, representantes de organismos internacionales, autoridades de diferentes organismos, comandantes en jefe de las tres armas, representantes de los diferentes cultos y religiones del país y de organizaciones sociales nacionales e internacionales, y en particular, al Presidente de la República electo, José Mujica y al Vicepresidente Danilo Astori que, entre otros, se encontraban en las barras de la Cámara de Diputados.
En los tramos iniciales de su alocución, Passada -que en la anterior legislatura presidió la Comisión de Legislación del Trabajo a partir de 2007- aseguró que "sin amor esto no se puede hacer, podré tener errores pero tengan la convicción de que lo hago con entrega y compromiso porque amo lo que quiero, amo lo que hago y amo esta Patria que tenemos que cambiar entre todos".
La titular de la rama baja del Parlamento señaló que la presente Legislatura coincidirá con el Bicentenario de la Revolución Hispanoamericana. "En aquél entonces -recordó- nuestros pueblos comenzaban sus procesos de independencia y autodeterminación y encontraremos gran parte de las definiciones políticas más importantes de la Revolución Oriental y del Proyecto Artiguista". En ese marco, Passada propuso conformar una comisión integrada por el Parlamento Nacional y el Poder Ejecutivo para preparar la conmemoración del 200º Aniversario de la Revolución Oriental de 1811.
En su discurso la representante nacional destacó los valores y principios que sustentaron la Revolución de 1811 y muy especialmente el legado político de José Artigas. "En la solemnidad de este recinto deberá sonar con toda fuerza en cada uno de nuestros actos esa hermosa frase de Artigas: ‘Que los más infelices sean los más privilegiados’, citó, ante el aplauso sostenido de los presentes.
Con esa premisa, Passada señaló que "esto nos obliga a abordar los grandes problemas del país como educación, salud, vivienda y seguridad, entre otros, como políticas de Estado en beneficio de la población y en particular de los sectores más vulnerables".
En otro tramo de su alocución, la novel Presidenta de la Cámara de Diputados, adelantó que "honradez, prudencia, probidad y austeridad deberán constituirse en una referencia permanente de todo nuestro accionar ".
Passada aseguró que "trabajaremos para que la democracia representativa no olvide a la democracia participativa. La primera obligación para nosotros, coincidiendo con el ideario artiguista es escuchar todas las voces, pero fundamentalmente aquéllos que siguen siendo los más postergados, los más débiles y los menos instruidos. Cambiar la situación de los pobres que aún no hemos incluido en el plano social activo, es nuestro principal objetivo".
En otro orden, Passada resaltó que en un mundo globalizado adquiere especial importancia la defensa de la cultura y los valores nacionales, muchos compartidos con los países hermanos, por lo cual consideró como imprescindible profundizar los lazos regionales en el plano económico, social y cultural; aprovechando para ello la capacidad del MERCOSUR y UNSUR como organismos competentes. Latinoamérica es una región rica, la cual debe establecer por sí misma los caminos para un desarrollo sustentable que atienda todas las asimetrías existentes, afirmó.
En ese marco, sostuvo que se apuesta a la construcción de un modelo de desarrollo integral y multidimensional del crecimiento económico y donde la tecnología contemple el desarrollo social, cultural, la sustentabilidad y el respeto por la biodiversidad. Instó a los demás legisladores a brindar todo el esfuerzo y compromiso para que los pilares fundamentales de la democracia nacional sean sostenidos con la honestidad intelectual de cada uno, respetando ese compromiso con el pueblo.
Por otra parte, Passada recordó el Reglamento de Tierras redactado por Artigas en 1815 cuyo objetivo era repoblar la campaña y distribuir justicia entre los orientales. Si bien existieron intentos que buscaron beneficiar a grupos de colonos -a través de la creación del Instituto Nacional de Colonización- durante muchos años las políticas sólo favorecieron a unos pocos, subrayó la Diputada. "La tierra es un fin estratégico. No sólo es para el que la trabaje, sino también para que vivan nuestros hijos del campo", enfatizó y añadió que se discutirá la legislación para la entrega de más tierras ociosas del Estado, dado que en lo últimos cinco años se incorporaron 43.000 hectáreas para el INC y se prevén agregar otras 250.000 en los próximos años. Como principio de nación, se debe continuar trabajando para distribuir las tierras apostando a la consigna de Artigas.
Asimismo, agregó que otro tema que debe dejar de ser una deuda social es la educación, para que el conocimiento no sea cosa de unos pocos y la nación no se vea comprometida. En tal sentido, sostuvo que el acceso al saber y al conocimiento debe democratizarse, llegando a los menos privilegiados y los más pobres. Estos temas deben ser parte del desvelo sobre las preferencias partidarias ya que hace al desarrollo económico, social y cultural del país.
En ese sentido, sostuvo que la Universidad de la República deberá estar abierta a su público y no estar cerrada al interior del país. Se precisan médicos que estudien y se radiquen en el campo, además de tecnólogos, técnicos, profesores y maestros que enseñen con las últimas tecnologías, porque el arte y el oficio no van separados de la mente, aseguró.
También se refirió a Pedro Figari en su etapa de legislador, hace 110 años, quien promovió la creación de la escuela de artes y oficios conocida como la educación industrial. Figari sostenía que la obra más importante es la del conocimiento y la educación es el puente entre el hoy y el mañana, lo cual es el futuro de la República.
En tan sentido, Uruguay tiene desafíos por delante que se deben abordar, entre los que se encuentran la necesidad de actualizar conocimientos en materia tecnológica para ponerlos al servicio de la producción. Se precisan, también, educadores comprometidos con la causa nacional, para lo cual los niños deben ser libres para poder pensar y desarrollar su conocimiento.
Exhortó a realizar un debate en esta materia a nivel legislativo, ya que la educación no es un tema que corresponde sólo a educadores, sino que debe ser responsabilidad de todos y el Parlamento no deberá estar ausente en ese debate. Así como tampoco la salud es solamente un tema de médicos, ni la vivienda de los arquitectos, ni la justicia de los abogados. Para que se traten de temas nacionales, también deben tratarse a nivel parlamentario. El Estado, el Gobierno y la sociedad precisan retomar actitudes idealistas que se conjuguen con la realidad que nos rodea, y en ese marco anunció que el Parlamento estará presente en todos los temas que hacen a la vida de los uruguayos.
Finalmente, Ivonne Passada reflexionó que el inicio de una nueva legislatura como sucede cada 15 de febrero es importante ya que demuestra el triunfo de la democracia. En el último siglo, nuestro país tuvo tres disoluciones de las cámaras, siendo la última la más dolorosa, puesto que dejó marcas en todos los uruguayos.
También es un día especial, porque en esta oportunidad "se pagan deudas que la democracia le debe a nuestro pueblo", en referencia al hecho que una mujer asuma la responsabilidad de la Presidencia de la Asamblea General, lo cual es un hito para el Parlamento.
En ese sentido, hacia la figura de Lucía Topolansky, realizó un homenaje a todas las mujeres y especialmente a aquellas silenciosas que se organizan en torno a sus derechos olvidados, como lo son las trabajadoras domesticas, las mujeres rurales, las afrodescendientes que esperan no ser excluidas por su credo, las madres que aun buscan a sus hijos desaparecidos y tantas otras mujeres luchadores, como las sindicalistas, las mujeres de todos los partidos políticos y "a todos los hombres y mujeres que ayudan a diario en forma comprometida con la causa a parir una patria grande para todos.
