sábado, 22 de agosto de 2009

Día de la Independencia un poco de historia




La Independencia del Uruguay es una sucesión de hechos que lograron su culminación a las diez de la mañana de un 18 de Julio de 1830 en la Plaza Matriz con la jura de nuestra primera constitución, aquí nace la República Oriental del Uruguay como estado soberano e independiente. ¿Por qué entonces el 25 de agosto de 1825? Porque este año fue decisivo para lograr nuestra independencia.

El país estaba bajo la dominación brasileña y Artigas se había exiliado al Paraguay. Una madrugada de 1825 un pequeño grupo de orientales (conocido como los 33 Orientales) realizó la llamada Cruzada Libertadora, desencadenando así una serie de victorias que llevarían a nuestra independencia.

Los orientales deciden pedir ayuda a las autoridades porteñas por lo cual algunos se trasladan a Buenos Aires. Juan Antonio Lavalleja es distinguido para liderar a este grupo de patriotas, a él le corresponde organizar la revolución.

Cuando se ultiman todos los detalles emprenden el viaje hacia la patria, cruzando el Río Uruguay en dos lanchones y desembarcando en la playa de la Agraciada la madrugada del 19 de abril de 1825. Libertad o muerte, es el lema de su bandera. Bandera que hasta el día de hoy flamea en todos los actos patrios.

En el momento del desembarco este puñado de hombres hizo el juramento de liberar a la patria, momento que quedó registrado en el óleo que pintó Juan Manuel Blanes años después.

En el mes de junio se instaló en la Villa de la Florida un Gobierno Provisorio, cuya tarea más importante fue la de convocar una sala de Representantes para redactar las leyes fundamentales del incipiente Estado Oriental.

Se dispone el envío de representantes ante las Provincias Unidas de la Plata para expresar su unión a ellas como un Estado confederal libre e independiente. Se creó la Mesa de Guerra y la Administración y Tesorería General de las Rentas Públicas, actuales Ministerios de Defensa Nacional y de Economía y Finanzas.

Se establecen las condiciones de elección de los miembros de la Sala de Representantes. El 18 de agosto de 1825 estos hombres electos integraron la Honorable Sala que sería presidida por Juan Francisco Larrobla.

Dos días después juraron sostener y defender la libertad.
Así llegamos a la memorable reunión del 25 de agosto, día en que se aprobaron tres leyes fundamentales: de Independencia, de Unión y de Creación del Pabellón.
Casi cinco años después, el 18 de julio de 1830, se juró nuestra primera Carta Magna. Veinte años atrás Artigas había manifestado la necesidad de garantizar la soberanía popular a través de una constitución. Una comisión redactó el proyecto, el cual fue estudiado y luego aprobado por la Asamblea Constituyente y Legislativa. Esta primera constitución se mantuvo en vigencia por casi noventa años, y muchos de sus principios (forma y distribución de poderes del Estado, derechos y garantías de los ciudadanos) todavía se conservan en el texto actual.

A partir del 18 de julio de 1830 la antigua Provincia Oriental se organizó como Estado soberano, adoptando el nombre de República Oriental del Uruguay.
Pero nada de esto habría ocurrido si aquel 25 de agosto de 1825, en la Piedra Alta, a orillas del río Santa Lucía Chico, Juan Francisco Larrobla, ante los demás integrantes de la Honorable Sala de Representantes y vecinos de la zona, no hubiera leído el Acta de Independencia. Es en esta zona del departamento de Florida donde pueden apreciarse muchas placas recordatorias de aquel acontecimiento.