25.03.2010 | 11.09
Fuente: http://www.espectador.com/1v4_contenido.php?id=177488&sts=1
La cantidad de infartos agudos de miocardio en Uruguay cayó 17,1% a partir de las medidas que el gobierno anterior tomó para combatir el tabaquismo. Esta cifra se desprende de un estudio del Centro de Investigación para la Epidemia del Tabaquismo, que fue presentado en la mañana de este jueves.En este ámbito, el ministro de Salud Pública, Daniel Olesker, transmitió el compromiso del gobierno de continuar aumentando los impuestos a la industria tabacalera.
El objetivo de este estudio que se realizó fue determinar el impacto de la prohibición de fumar en espacios cerrados sobre la cantidad de infartos agudos de miocardio que se registran en Uruguay. Es por eso que se analizaron las admisiones en hospitales dos años antes y dos años después de la prohibición de fumar establecida el primero de marzo de 2006 durante el gobierno de Tabaré Vázquez.
Este relevamiento se hizo en 37 centros participantes, los que internan 79% del total de los pacientes que ingresan con ese diagnóstico, o sea, con infarto agudo de miocardio. En este estudio se incluyeron 7.949 pacientes y se llegó a la conclusión de que 4.345 se admitieron a los hospitales estudiados con infarto agudo de miocardio. Luego del primero de marzo de 2006 con esta medida de prohibir fumar en espacios cerrados, el número se redujo a 3.604, o sea, una caída de 17.1% de ingresos a hospitales por infarto agudo de miocardio.
Según se afirmó, esa reducción fue más marcada entre los jóvenes teniendo más magnitud los días viernes y sábado porque en esos días se fumaba dentro de los locales nocturnos habilitados para discoteca, baile. Por lo tanto, esta medida afectó en beneficio de jóvenes.
Los pacientes asistidos en centros públicos se beneficiaron menos de la medida que los asistidos en centros privados y el estudio dice que se debe investigar las razones que llevaron a ello para luego desarrollar acciones que tiendan a corregir esa inequidad. Pero en total, según concluye el informe, se evitaron 400 infartos por año al prohibir fumar en espacios cerrados.
En la Encuesta Mundial de Tabaquismo en Adultos (GATS) que se presentó en las últimas semanas del gobierno de Tabaré Vázquez, un dato relacionado a este estudio es que 16.5% de los encuestados dijo estar expuesto al humo de tabaco en los lugares de trabajo, o sea, un lugar cerrado donde está prohibido fumar. Vinculado a los datos que se divulgaron este jueves se informó que se va a crear en una fecha a determinar en unos meses una red social llamada alerta tabaco que permitirá que la sociedad civil pueda ser protagonista en el control de la aplicación de las medidas instrumentadas por el gobierno de Vázquez.
La idea es denunciar cuando se observe una situación irregular tanto en lo que tiene que ver con la publicidad y otras medidas de carácter higiénico o también los locales en cuanto a la venta prohibida a menores de 18 años.
Eduardo Bianco, presidente del Centro de Investigación para la Epidemia del Tabaquismo, explicó los objetivos de esta red que se va a crear llamada Alerta Tabaco.
“El gobierno tiene una responsabilidad, pero la sociedad civil también que es la responsabilidad de complementar lo que se hace en el gobierno y Parlamento incrementando las políticas públicas. Nosotros que como otras organizaciones de la sociedad civil vamos a asumir, estamos finalizando hoy. La doctora Laura Roballo y el doctor Miguel Asqueta van a dar el lineamiento de esta red de vigilancia, que es la primera red de vigilancia a nivel latinoamericano y también puede llegar a ser un modelo para otro país”, señaló Bianco.
Por su parte, Asqueta, quien fuera diputado por Colonia del sector Alianza Nacional y presidente de la Comisión de Salud del Parlamento en el período anterior, dijo que se necesita la colaboración de las personas para poder denunciar irregularidades. Afirmó que no hay que tener miedo a ser llamado “buchón” y que hay que denunciar a los locales comerciales que venden, por ejemplo, cigarrillos a menores de edad porque el tabaquismo es una verdadera catástrofe sanitaria.
“Pero que sólo va a casi cualquier quiosco, no quiero decir todos, aquí en Montevideo y se pone en el costado a ver que vienen los menores y les venden el cigarro suelto, cosa que está prohibida y que algún día la sociedad uruguaya tendrá que dejar de pensar que es ‘buchón’ quien denuncia ese tipo de cosas. Para mí ‘buchón’ era otra cosa en mi adolescencia o en la etapa de la dictadura y yo sé muy bien lo que es ser ‘buchón’ y lo que es no ser ‘buchón’. Tenemos que colaborar que la sociedad sea más sana y colaborar que todos seamos mejores ciudadanos, es algo que todos vamos a tener que cambiar en nuestras cabezas”, afirmó Asqueta.
Según dijeron los responsables de Alerta Tabaco, todavía no están establecidos los mecanismos para poder denunciar las irregularidades, pero se dijo que el objetivo es denunciar irregularidades en cuanto a las disposiciones habientes libre de humo de tabaco en cuanto a publicidad, advertencias sanitarias, venta de cigarrillos a menores y también precio de venta a minoristas, contrabando y tratamiento del tabaquismo.
En tanto, el ministro de Salud Pública, Daniel Olesker, se refirió a continuar aumentando los impuestos a la industria tabacalera. En esta actividad participaron la ex ministra María Julia Muñoz, quien dijo que su sucesor continuará con la política de subir los impuestos a los cigarrillos cuando se entienda conveniente y Olesker agregó que está claro que el precio del cigarrillo es una de las claves para poder reducir la cantidad de personas que fuman en la actualidad.
Sostuvo que se van a seguir profundizando las otras líneas como, por ejemplo, habilitar denuncias por el Ministerio de Salud Pública y señaló que por mes se acercan al ministerio 200 personas a denunciar incumplimientos en cuanto a las disposiciones sobre el tabaquismo, pero que la amplia mayoría se trata de denuncias anónimas. Por último, recordó que el presidente José Mujica ordenó a Cancillería de la República, al Ministerio de Economía y Finanzas y al Ministerio de Salud Pública que estudien una respuesta a la denuncia que la tabacalera Philip Morris presentó al Banco Mundial contra el Estado uruguayo por las distintas medidas de prohibición respecto al tabaquismo.