Informe
En el informe de las conclusiones y recomendaciones del Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de Naciones Unidas se destaca que Uruguay tiene las tasas más bajas de desocupación de su historia, aunque también se destacan algunas debilidades como por ejemplo: violencia doméstica.
En el anfiteatro Artigas del Ministerio de Relaciones Exteriores, se realizó la presentación de las conclusiones y recomendaciones efectuadas por el Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de Naciones Unidas.
El canciller, Luis Almagro destacó que las recomendaciones potencian la implementación de políticas públicas que aseguran las condiciones de bienestar y de justicia social de todos los ciudadanos. Informó que Uruguay quedó al día en la presentación de este tipo de informes.
Se expusieron las políticas sociales y las medidas concretas destinadas a garantizar la vigencia de derechos en el país, a partir del año 2005, cuando se asumieron las consecuencias de la crisis como una verdadera emergencia nacional y se adoptó un instrumento específico para hacerle frente a este problema.
La alternativa elegida para enfrentar la emergencia permitió "intervenir de forma determinante en los grupos de población más desfavorecidos, evitando que la crisis se sumiera en la extrema pobreza y en la marginalización".
Se destacó la especial preocupación por el fortalecimiento normativo e institucional en estas áreas, como la creación del Ministerio de Desarrollo Social y el Gabinete Social con su órgano consultivo el Consejo Nacional de Políticas Sociales.
Un aspecto relevante planteado en el informe fue que Uruguay "tiene una de las tasas más bajas de desocupación de su historia".
A la vez, se dejó en claro que la principal prioridad del gobierno es la lucha contra la "pobreza y la indigencia", reafirmando que la consigna es erradicar la indigencia al final del presente mandato y reducir los indicadores de pobreza. Con respecto a las observaciones del Comité, Almagro dijo que se hicieron algunas puntualizaciones que tienen que ver con situaciones de debilidad social en algunos sectores como "violencia doméstica, discriminación hacia las discapacidades y fundamentalmente en la necesidad de fortalecer algunas áreas legislativas y de trabajo de comisiones que están plasmadas en papel pero aún no están consolidadas en la práctica".
Estuvieron presentes el ministro de Educación y Cultura, Ricardo Ehrlich, la ministra de Desarrollo Social, Ana María Vignoli y el canciller Luis Almagro
