jueves, 24 de junio de 2010
INCORPORACIÓN DE NUEVOS COLONOS Y MÁS TIERRAS APUNTA A PROFUNDIZAR CAMBIOS INICIADOS
INSTITUTO NACIONAL DE COLONIZACIÓN
Los objetivos que el Instituto Nacional de Colonización (INC) se fijó para el quinquenio incluyen la incorporación de un promedio de 1.500 colonos y sus familias, así como de 250.000 hás. Además de apuntar a fomentar el desarrollo de la producción lechera y ovina, el Instituto brinda a los colonos las facilidades para que estos productores familiares tengan éxito en esa tarea y puedan vivir dignamente en el medio rural al cual pertenecen.
Los objetivos a llevar adelante por parte del Instituto Nacional de Colonización (INC) están enfocados en la adquisición de una importante cartera de tierras, con la finalidad de ser adjudicadas a la concreción de diversos proyectos de permanencia de los colonos actuales y futuros, en el medio rural.
Algunos de estos proyectos están orientados a la producción lechera, para lo cual el Instituto prevé la incorporación de campos aptos para esa actividad. Asimismo, existen proyectos a ser desarrollados en otro tipo de campos, los cuales están vinculados a la producción ovina.
Ambos rubros de actividad tienen un fuerte impacto en la producción agropecuaria familiar, sector al cual está dirigido el Instituto de Colonización, sostuvo el presidente del Instituto Nacional de Colonización, ingeniero Andrés Berterreche.
Por otra parte, el Instituto como empresa encargada de la administración de tierras, debe estar al servicio de los planes de desarrollo rural que se fije como meta el conjunto de la institucionalidad pública agropecuaria.
Por este motivo, el INC lleva adelante una visión de planificación en la compra y adjudicación de tierras estrechamente relacionada y vinculada con el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, y en particular, su Dirección de Desarrollo Rural.
La cantidad de colonos y familias que el Instituto prevé beneficiar a lo largo del quinquenio que inicia, se sitúa entre los mil y dos mil.
Por otra parte, la superficie de tierras que el INC se propone asignar a estos nuevos colonos es de 250.000 hectáreas. Aunque es un objetivo ambicioso, existe la firme determinación de avanzar en ese sentido.
Se trata de una área importante, más aún considerando que el Instituto tiene actualmente la propiedad de algo más de 300.000 hectáreas. Por tanto, estaría casi duplicando la superficie que actualmente reparte entre sus colonos arrendatarios.
Finalmente, el ingeniero Berterreche destacó que el objetivo del Instituto va más allá de facilitar la tierra para ser trabajada, ya que se propone además brindar a los colonos las facilidades para que estos productores familiares tengan éxito en esa tarea y también vivan dignamente en el medio rural, al cual pertenecen y del cual aspiran vivir. Además, el Instituto tiene el cometido de que esta actividad incida positivamente en la totalidad del desarrollo rural.
Las facilidades que el INC brinda a los antiguos y nuevos colonos abarcan el financiamiento y capacitación técnica, además de promover su organización, ya que el asociativismo es el modo de lograr sus metas y enfrentar la competencia que implica el agronegocio.
Si bien existe una importante dinámica en este sector, datos extraídos del sitio web del INC, permiten afirmar que el área afectada por el Instituto es de más de 490.000 hectáreas, usufructuadas por más de 3.800 colonos.
El porcentaje de arrendatarios y promitentes compradores varía según los departamentos, siendo el mayor de 87,7% en Tacuarembo y el mínimo de 44,1%, en Lavalleja.