EFE
Un duelo prometedor en igualdad, tensión e intensidad definirá mañana el campeón de la Copa América 2011 en el estadio Monumental de Buenos Aires, en un choque en el que Uruguay persigue su decimoquinto título del torneo, un récord en esta competición, contra la convicción de la selección de Paraguay.
Un partido decisivo, sin margen de error, desafía a ambos conjuntos, con el papel de favorito para el combinado celeste, que tiene la oportunidad de quedarse en solitario al frente del palmarés de la cita continental, en el que está igualado con Argentina, ambos con catorce trofeos. Mañana tiene al alcance el decimoquinto.
Uruguay, que no levanta el título de la Copa América desde 1995, y Paraguay, cuyo último campeonato fue en 1979, llegan al duelo en diferentes condiciones. Si los celestes han ofrecido un rendimiento notable, sobre todo en semifinales, los rojiblancos se han presentado en la final con sufrimiento, dos tandas de penaltis consecutivas y un héroe: el portero Justo Villar.
No ha ganado y no ha perdido Paraguay ningún encuentro en la Copa América 2011. Ni en la fase de grupos, con tres empates seguidos, ni en cuartos de final ni en semifinales, cuando derribó, por este orden, a Brasil y Venezuela tras el 0-0 durante los 120 minutos entre el tiempo reglamentario y la prórroga.
Más convincente ha sido el camino de Uruguay a la final. El equipo dirigido por Óscar Washington Tabárez tampoco ha concedido ninguna derrota en el torneo, con dos triunfos y tres empates, uno de ellos frente a la Argentina de Lionel Messi, Kun Agüero o Gonzalo Higuaín, a la que eliminó en los penaltis en cuartos de final.
La selección uruguaya ha ido de menos a mas en la competición, liderada por su potencial ofensivo, los goles de Luis Suárez, que afronta la final como el máximo anotador junto a Agüero, con tres tantos cada uno, la movilidad y las cualidades de Diego Forlán, la seguridad defensiva y las paradas de un brillante Fernando Muslera.
Mañana espera un partido duro. Es un opinión compartida tanto por su técnico, Oscar Washington Tabárez, como por los futbolistas referentes, entre ellos el capitán Diego Lugano o su goleador Diego Forlán.
"Nos preparamos como si Paraguay fuera a dar en la final el máximo de su potencial. Por respeto y por forma de trabajo, es lo que debemos esperar. Si después eso no sucede y el rival juega por debajo de sus posibilidades, será mejor para nosotros y no nos sorprenderá", advirtió Tabárez.
El técnico contará mañana de nuevo con su fiable ataque, formado por Forlán y Luis Suárez, una dupla ofensiva temible para cualquier rival. El también goleador Edison Cavani comenzará la final desde el banquillo debido a que acaba de recuperarse de un esguince de rodilla.
Al centro del campo regresará el "todoterreno" Diego Pérez, un jugador clave en el balance defensivo y en los relevos y que volverá a la alineación titular después de cumplir sanción en el último encuentro frente a Perú.
Enfrente estará Paraguay, mermada por las bajas de su delantero estrella, Roque Santa Cruz, del defensa Aureliano Torres y del centrocampista Jonathan Santana, los dos primeros por sendas lesiones musculares y el último por sanción, pero que afronta la final con mucha seriedad, convicción y sin renunciar a nada.
El equipo rojiblanco tiene una gran oportunidad de volver a la primera plana del fútbol sudamericano. No disputa la final ni gana la Copa desde hace más de 31 años, cuando venció a Chile al mejor de tres encuentros, precisamente el último disputado en Buenos Aires. Ese fue su segundo y último título del torneo, junto al de 1953.
Ese es el reto de mañana, la conquista del trofeo, para el conjunto dirigido por el argentino Gerardo Martino, que no podrá sentarse en el banquillo, una vez que cumplirá el primero de los dos partidos de sanción que le impuso el comité disciplinario de la Conmebol por su expulsión en las semifinales ante Venezuela.
Su ayudante, Jorge Pautasso, también está suspendido, con lo que Adrián Coria será el encargado de dirigir al equipo desde el banquillo, en un duelo en el que Martino deberá recomponer de nuevo su once por las bajas, aunque ya recupera al defensa central Antolín Alcaraz, baja en el anterior choque por sanción y que será titular.
El once es una incógnita. Sin Santa Cruz, Torres y Santana, además de la duda por lesión de Elvis Marecos, el técnico no incluirá excesivos cambios respecto a las semifinales, aunque, probablemente, Marcelo Estigarribia volverá al equipo inicial en uno de los extremos, con Nelson Haedo Valdez y Lucas Barrios en punta.
Alineaciones probables:
Uruguay: Muslera; Maxi Pereira, Lugano, Coates, Martín Cáceres; Álvaro González, Diego Pérez, Egidio Arévalo, Álvaro Pereira; Forlán y Luis Suárez.
Paraguay: Justo Villar; Verón, Da Silva, Alcaraz, Piris; Vera u Ortigoza, Riveros, Cáceres, Estigarribia; Valdez y Lucas Barrios.
Arbitro: Salvio Fagundes (Brasil).
Estadio: Monumental, en Buenos Aires.
Hora: 16.00 (19.00 GMT).
FUENTE: http://www.adn.es/deportes/20110723/NWS-0525-Uruguay-inedita-empate-record-final.html