jueves, 26 de noviembre de 2009

La tercera fotografía de las preferencias de los uruguayos hacia la segunda vuelta

espectador.com

EMILIANO COTELO:
Estamos a 9 días de la realización de la tercera y última elección de este ciclo electoral nacional 2009, en que se definirá la Presidencia de la República entre José Mujica y Luis Alberto Lacalle.

El politólogo Oscar A. Bottinelli, director de Factum, llega ahora para traer los números de la tercera Encuesta Nacional Factum. ¿Qué dicen esos números? ¿Cuál es el análisis? ¿Qué perspectivas se abren? Con él vamos a charlar en los próximos minutos.


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EC – Tres encuestas en tres semanas.

OSCAR A. BOTTINELLI:
Tres encuestas, esta es la tercera en tres semanas, en una campaña electoral que a los efectos de encuestas tiene cuatro semanas. La semana que viene vamos a presentar la cuarta encuesta, la última, y como la encuesta se cierra el fin de semana –el domingo– nos va a quedar sin cubrir lo que la gente piensa y decide entre ese fin de semana y el domingo siguiente en que se vota.

El estudio que hicimos respecto al 25 de octubre nos dio que entre ese domingo y el siguiente el 10% de los uruguayos decidió el voto, es una cantidad muy grande.

EC - El 10%.

OAB – Sí, 1 de cada 10. Algunos afirmaron el voto que ya tenían predefinido pero del que todavía tenían dudas y otros eran los indecisos que tuvieron que volcar la decisión hacia algún lado.

EC – Dejas eso picando como para que lo tengamos en cuenta la semana que viene.

OAB – Lo dejo picando para la semana que viene.

EC – ¿Cuándo fue realizada y qué características tuvo la encuesta de hoy?

OAB – La Encuesta Nacional Factum que damos hoy da un panorama de intención electoral al pasado domingo 15 de noviembre. Los datos corresponden siempre a la misma pregunta “El domingo 29 de noviembre se define la elección de presidente y vicepresidente de la República entre estas dos fórmulas –se menciona una y otra cambiando el orden en cada encuestado–, ¿a cuál de ellas se inclina a votar?”. El margen de error sobre los datos presentados debe asumirse que oscila en torno a +/- 3%.

EC – Veamos entonces cuáles son los números que surgen de esa encuesta: por la fórmula Mujica-Astori 50%, por la fórmula Lacalle-Larrañaga 40% y los indefinidos suman 10%.

OAB – Dividiendo un poco tenemos que en Montevideo la relación Mujica-Astori, Lacalle-Larrañaga- es de 61-30. En el interior costero, es decir en los departamentos donde el Frente fue primera fuerza en las elecciones nacionales (Salto, Paysandú, Río Negro, Soriano, Colonia, San José, Florida, Canelones, Maldonado y Rocha) es de 46 a 44 a favor de Mujica-Astori. Y en el interior profundo, es decir el resto del país más recostado a Brasil donde la primera fuerza es el Partido Nacional (PN), 35 Mujica-Astori, 55 Lacalle-Larrañaga.

EC – En cada uno de los casos queda aparte el grupo de los indefinidos.

OAB – Sí, en un caso 9, en el otro 10 y en el otro 10, no hay grandes variaciones, es parejo.

EC – Lo que sí vuelve a quedar claro es el comportamiento distinto que se da en cada una de esas tres zonas.

OAB – Sí, y lo importante es que esta incorporación que hemos hecho desde la semana pasada, de dividir el país en la presentación de datos saliendo del clásico “Montevideo-Interior” nos permite ver con claridad que hay dos grandes “interior” de comportamiento claramente diferenciado: el interior costero y el interior profundo. El 25 de octubre se vio que había esos dos comportamientos y ahora también: uno es Montevideo, otro es el interior costero y otro es el interior profundo, y son tres realidades políticas diferentes.

EC – Repito los números globales: Mujica-Astori 50%, Lacalle-Larrañaga 40%, indefinidos 10%. ¿Qué cambios implican estos números en comparación con la semana pasada y en comparación también con la primera de las tres encuestas?

OAB – En primer lugar, comparamos la Encuesta Nacional Factum de tres semanas. En esto hay que tener mucho cuidado porque hemos visto en varios lados comparaciones mal hechas, por ejemplo comparar distintas encuestas entre sí, y más grave aún encuestas de distintas semanas. Hemos visto en algún lado algún titular que decía “subió o bajó tal”, comparando una encuesta de una semana con una encuesta hecha por otro, con otra metodología, de otra semana. Sólo es comparable lo que ocurre en el tiempo, no nos olvidemos que las semanas en un balotaje que tiene cinco semanas de punta a punta equivalen a los meses en el período julio-octubre, por la intensidad del movimiento de opinión pública, es decir que el transcurso de una semana es tan importante como en el período anterior fue el transcurso de un mes.

Comparado así tenemos que Mujica aumenta un punto en relación a la semana anterior, que estaba igual que la primera semana. En otras palabras, en tres semanas Mujica aumentó un punto, pasó de 49 a 50.

Lacalle está igual que la semana anterior pero menos de dos puntos que al comienzo. Mientras Mujica sube entre la segunda y la tercera semana, Lacalle tuvo una caída de la primera a la segunda y luego se estabilizó. Esto marca una separación de las diferencias.

Los indefinidos son uno menos que la semana pasada pero uno más que al principio. Recordemos que entre la primera y segunda semana esos dos puntos que cayó Lacalle se pasaron a la indefinición, que ahora se reduce un poquito. Nos pasó entre julio y octubre, no se da ese proceso lineal de que empieza un número de indefinidos y se va achicando tiempo a tiempo sino que primero se agrandó, ahora se achica, pero todavía es un poco mayor que al principio.

Cuando hablamos de indefinidos incluimos en blanco y anulado, la semana que viene sí lo vamos a diferenciar. Porque estamos encontrando comportamientos contradictorios, gente que primero dice en blanco o anulado, luego dice que prefiere alguien, pero en principio hay ya casi definido un 2% de votos en blanco y anulados y un 8% de realmente indecisos. Estos indecisos no solamente están indecisos entre Mujica y Lacalle sino que están indecisos entre Mujica y el voto en blanco o anulado, o entre Lacalle y el voto en blanco o anulado; no sólo hay indecisión entre los candidatos hay gente que…

EC - …son tres opciones, o cuatro en realidad.

OAB – Sí, desde el punto de vista del efecto político, en blanco y anulado es lo mismo, las opciones reales son tres: voto a uno, voto a otro, o no voto a nadie. Y realmente hay gente que está dudando, quizá los movimientos más esperables sean de si gente que tiene clara orientación hacia un lado vota o deja de votar, es decir vota a la fórmula o vota en blanco y anulado; me parece que por ahí hay uno de los temas importantes para la semana que viene.

EC – ¿Y cuál es la tendencia que surge de estas tres semanas?

OAB – Lo que vemos es que surgió un cuadro bastante claro inicialmente, pero lo importante es que empezó con una distancia de siete puntos de Mujica sobre Lacalle, a la segunda semana ya fue de nueve y ahora es de 10. Esto no sugiere que sea una tendencia creciente, no es que para la semana que viene haya que esperar 11 o 12; incluso probablemente la diferencia se podría achicar porque la velocidad de decisión de la gente volcada hacia la izquierda es un poco mayor que la de la gente volcada hacia el otro lado, lo que quiere decir que probablemente esta diferencia quede igual o se achique –estoy hablando hacia la próxima encuesta, no hacia el resultado final–. Pero lo que es claro es que desde el 1º de noviembre hasta el 15 de noviembre se amplió la brecha.

EC – ¿Y con respecto a la tendencia de los indefinidos?

OAB – Más que tendencia de voto lo que vamos a ver es qué componente, qué otros datos nos dan los indefinidos.

EC –¿En qué sentido?

OAB – Lo que vemos es que en ese 11% hay un poco más del 2% que prefiere a Mujica. Lo prefiere y no está diciendo que lo vota, no es seguro que lo vote, lo que es claro es que este 2% está entre votar a Mujica-Astori o votar en blanco o anulado.

Del otro lado pasa lo mismo, hay otro poco más del 2% que prefiere a Lacalle, pero no es seguro que lo vote, y si no lo vota no es que va a votar a Mujica, si no vota a Lacalle va a votar en blanco o anulado.

Después tenemos otro 2%, que es el que mencionamos antes, que se está inclinando a votar en blanco o anulado. Y el resto, que es un poquito más del 4%, no tiene preferencia alguna, son los indecisos puros, son las reales incógnitas que tenemos y que los demás elementos de la encuesta por ahora no permiten prever qué orientación o simpatía tienen.


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EC – ¿Quién creen los uruguayos que va a ser el próximo presidente? Eso también lo mide Factum.

OAB – Sí, esto lo medimos, lo hemos presentado en varias oportunidades tanto entre julio y octubre como hacia las elecciones internas. Es el índice Winner, que muestra qué percepción de resultado tiene la gente. La pregunta precisamente dice “Independientemente de sus preferencias políticas y personales, ¿qué fórmula presidencial cree usted que va a ganar la Presidencia de la República?”. Acá se trata de que la gente en lo posible no diga lo que le gusta sino lo que cree que va a pasar.

EC – Cree que gana la fórmula Mujica-Astori el 77%, cree que gana la fórmula Lacalle-Larrañaga el 15%, y no sabe 8%.

OAB – Aquí vemos que la percepción de los uruguayos, que podrá ser real o no, es muy clara: 3 de cada 4 uruguayos creen que el próximo presidente será Mujica y el próximo vicepresidente Astori. Lo más significativo es que esta creencia la tiene no sólo la casi totalidad de los frenteamplistas sino la mayoría de los blancos; el 54% de los que votaron al Partido Nacional en las elecciones nacionales cree que el próximo presidente va a ser Mujica, y la gran mayoría de los colorados, el 62%, cree que va a ganar la fórmula Mujica-Astori. Y en el resto, Partido Independiente, Asamblea Popular, en blanco y anulado –tomados como un conjunto– 3 de cada 4 creen que gana la fórmula Mujica-Astori.

En ese sentido, la conclusión es que la creencia o percepción de los uruguayos es dar por descontado el resultado del balotaje. Será así o no, ese es otro tema, esto no es lo que cree Factum, lo que Factum mide es que 3 de cada 4 uruguayos cree eso.