Uruguay y Chile firmaron un Tratado de Cooperación Técnica en Salud Mental junto a la OPS/OMS, en el marco de una creciente valoración interna de las experiencias locales existentes entre los países de la región. Según la Directora del Programa de Salud Mental, Renée del Castillo, este gobierno ha jerarquizado el tratamiento de la Salud Mental en Uruguay y ya está trabajando en la culminación de una Ley sobre el tema.
En el marco del Tratado de Cooperación Técnica (TCC) en Salud Mental, firmado entre Uruguay y Chile, y las Organizaciones Panamericana y Mundial de la Salud, se realizó esta mañana una conferencia de prensa en la sede del Ministerio de Salud Pública.
Estuvieron a cargo de la apertura, la directora del Programa Nacional de Salud Mental, Renée del Castillo; el director de Salud Mental de ASSE, Lizardo Valdez; el representante de la Organización Panamericana de la Salud, Gabriel Antoniel y el jefe del Departamento de Salud Mental de Chile, Alberto Minoletti.
Del Castillo destacó la importancia de este TCC, con el cual ambos países firmantes aspiran avanzar hacia una salud mental constitutiva de una salud integral, en y con la comunidad. La Directora recordó que entre los objetivos de la primer fase de este tratado refiere a la interinstitucionalización, la rehabilitación psicosocial, la inserción laboral y social de la personas con trastornos mentales severos y persistentes. Asimismo destacó que durante las tres jornadas que abarcará este encuentro, se conocerá más a fondo la red de recursos en salud mental y se detectarán los nodos críticos para el desarrollo de políticas de inclusión social. Adelantó que para el 2010 está previsto ocuparse de lleno en la legislación, planes de salud mental, políticas del primer nivel de atención, sistemas de registro y evaluación en salud mental.
En este sentido, destacó que Uruguay ya tiene creados los tres primeros capítulos de una ley de Salud Mental, en la que seguirá trabajando el año próximo.
Hasta hace poco tiempo, la tendencia en los países de la región era “mirar hacia afuera”, hacia los países del norte y no valorar la experiencia local, pero esta situación evolucionó hacia el intercambio y la cooperación de experiencias a nivel regional. Del Castillo señaló que desde que comenzó este gobierno los avances han sido significativos, sobre todo en el sector público. Recordó que durante este año se elaboraron importantes documentos, guías y normas –ya presentados en otras oportunidades- encaminándose hacia 2010 como un año donde la salud mental será prioritaria, introduciendo la psicoterapia y abordajes psicosociales, especialmente en el sector privado, que aún permanece algo más atrasado.
A continuación, el doctor Lizardo Valdez, realizó una breve reseña sobre la jerarquización que experimentó la atención en salud mental desde que ASSE se separó del MSP. Asimismo se refirió al cambio de atención al enfermo mental, cuando antes la prioridad no era el tratamiento, sino que no se escaparan de los centros en los que estaban recluídos. El nuevo modelo de atención, desmontó ese mecanismo “perverso” demostrando que en los hospitales psiquiátricos existe menos violencia, por ejemplo, que en los encuentros deportivos, bailes etc. A su entender se ha avanzado en este sentido significativamente, así como en la erradicación de muchos prejuicios, como el contagio, o que la adicción es la base de la delincuencia. Valdez subrayó que desde ASSE se trata de fomentar la capacidad de pensar con libertad, apoyar la tolerancia a las diferencias y la participación comunitaria. Añadió que desde el comienzo de su gestión se intentó priorizar el primer nivel de atención; el trabajo en equipos interdisciplinarios; la dignificación de la atención hospitalaria, la descentralización y coordinación con otros prestadores del sistema; la transparencia en la gestión; el mantener vínculos fluídos con la Universidad de la República a través de sus facultades; el avance hacia la asignación de cargos por concurso; apertura a la presentación de proyectos y participación de la comunidad.
Reconoció que este proyecto está en construcción pero también destacó que se han logrado avances importantes, habiendo pasado de una salud fragmentada en lo institucional y en los servicios que brindaba, a una Dirección de Salud Mental coordinada con un concepto de red que dejó atrás el individualismo médico.
“Estamos avanzando fuertemente hacia lo interinstitucional” puntualizó.
Por su parte, el representante chileno, Alberto Minoletti, se mostró muy satisfecho por este TCC firmado con Uruguay, porque a su entender, ambos países tienen objetivos compartidos en la temática. Este acuerdo servirá para reforzar procesos de aprendizaje, generar sinergias y traspasar logros, porque “no hay salud sin salud mental”, dijo. Específicamente entre los temas que le interesan a Chile, enumeró las transformaciones de los programas que realizó Uruguay, la red de procesos de reinserción social y el avance experimentado en los hospitales, centros de atención y rehabilitación. Asimismo destacó que luego de muchos años de experiencias en Chile se ha comprobado que los modelos comunitarios de atención son los que mejores resultados han dado, así como también se ha aprendido mucho con la red de atención primaria.
Finalmente el representante de OPS, saludó a los presentes y felicitó a ambos países por haber suscrito este Tratado que les aportará grandes beneficios.