sábado, 23 de mayo de 2009
Un mundo unido por el dolor
El último adiós. En España, Colombia y Argentina se produjeron expresiones oficiales de consternación, mientras intelectuales de muchos países levantaron sus voces de admiración
AGENCIAS Y EL PAÍS
Los ecos del fallecimiento de Mario Benedetti se hacen sentir en todo el mundo, y en especial en dos países: España y Cuba, ambos muy vinculados a la trayectoria del escritor. Pero también Venezuela, Chile y otras naciones se sumaron al duelo.
En España, todo el mundo de la cultura lamenta la pérdida del notable poeta y novelista, en testimonios que abarcan a músicos de la talla de Joaquín Sabina, escritores como el Premio Nobel José Saramago, y hasta el propio presidente del gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, quien ayer envió un telegrama de pésame a la familia del escritor, en el que destacó "la confianza inquebrantable en el ser humano" que deja como legado Benedetti.
El fallecimiento del prestigioso literato "nos deja huérfanos de uno de los escritores que mejor ha entendido la fuerza transformadora de la literatura y su capacidad para cambiar el mundo", consideró Zapatero.
Más personales fueron las palabras del cantautor Joan Manuel Serrat, quien optó por recordar a su amigo como "un muy reconocido poeta, y probablemente el más leído de la literatura latinoamericana. Su muerte, personalmente, me llega como una mezcla de tristeza y liberación. Porque en este caso, la muerte se presenta como liberadora".
"Todo lo que digamos de Benedetti será poco en comparación a lo que él hizo por acercar su poesía a todos los ciudadanos", afirmó por su parte la ministra de Cultura, Ángeles González Sinde. La jerarca subrayó "el enorme compromiso cívico, político y humano" del poeta, quien "hizo de su obra algo muy personal para muchos".
La razón de su éxito "radicó en que supo llegar al alma y las preocupaciones de los lectores, lo que significa que entendió como pocos la sociedad contemporánea", agregó la directora del Instituto Cervantes Carmen Caffarel, remarcando "el compromiso con los más débiles".
El poeta español Antonio Gamoneda, por su parte, manifestó que el escritor "era un ser admirable pero utilizaba un lenguaje normalizado, el lenguaje de la comunicación coloquial, que, aunque lo respeto muchísimo, no lo comparto".
La escritora uruguaya radicada en España, Cristina Peri Rossi se sumó a las declaraciones con un aporte personal, afirmando que "ha sido un autor muy querido. En ese sentido, hay una diferencia con Borges, por ejemplo, que siempre ha sido muy estimado por los críticos, pero poco estimado por los lectores".
Pero quizá Cuba sea el país extranjero que más cercana sienta la muerte del escritor. De hecho, hoy a las 10 hs., coincidiendo con el momento del sepelio en Montevideo, se realizará en La Habana, en Casa de las Américas, un homenaje de la intelectualidad cubana. La institución calificó a Benedetti como "uno de los intelectua- les más cercanos" a ella, recordando que el artista integró el Consejo de Dirección de Casa de las Américas desde fines de los `60.
También desde Argentina, Chile, Colombia, México y otros países, las reacciones no se hicieron esperar. Mientras el gobierno colombiano expresaba ayer sus condolencias a la familia y a los lectores de Benedetti, en México (donde La tregua editó un millón de ejemplares), el reconocido crítico Emmanuel Carballo remarcó el gran servicio que el escritor prestó "a las letras, porque inculcó de literatura a muchos jóvenes, encaminando a la gente que busca más literatura, poesía, novela".
"Él tocó las cuerdas de Eros, del amor, que es una cuerda natural de todos los poetas de veras, y a la vez habló a escala del pueblo, y eso no quiere decir que haya hablado con liviandad, sino todo lo contrario", sostuvo el poeta chileno Gonzalo Rojas, ganador del Premio Cervantes en 2003.
Por su parte, la Secretaría de Derechos Humanos de Argentina expresó su "profundo pesar" por la muerte del poeta, de quien destacó el compromiso como intelectual. En un extenso comunicado recordó la publicación de su libro Desaparecidos. "Se lo dedicó a todas las Madres, a todas las Abuelas, a todos los familiares. Ellos no faltaron en sus escritos. Los exiliados tampoco. A Benedetti habrá que extrañarlo y recordarlo", afirmó el texto del organismo del gobierno argentino.
Asimismo, resaltó que su compromiso político "le costó su exilio durante la dictadura uruguaya (1973-1985)", por lo cual el "militante convencido, durante esos duros años, residió en Argentina, Cuba, Perú y España".
"Su importante pluma, su palabra simple y su texto de gran contenido cruzaron fronteras", destacó el organismo de derechos humanos. Pero también de la vecina orilla, los cantantes Adriana Varela y Jairo, que musicalizaron y llevaron al gran público inolvidables poemas de Benedetti, manifestaron el enorme pesar.
"Estoy muy conmovida. Se fue un personaje absolutamente importante para todas las generaciones, por su compromiso con el arte, la poesía y por su visión del mundo", dijo Varela. La cantante de tangos afirmó sin embargo estar reconfortada de que Benedetti pudiera terminar su vida en Montevideo.
"Hoy es un día triste para todos los pueblos, y especialmente para aquellos que compartimos la lengua española". La afirmación, de Rodríguez Zapatero, refleja un sentir que ahora aúna a toda América hispana.
Saramago: "la tristeza no se aliviará tan pronto"
"La cabeza nos dice que no hay milagros, pero el corazón insiste en creer que un milagro de vez en cuando, además de no alterar el orden del mundo, vendría bien como compensación por las inevitables tristezas de la vida. En el fondo, queríamos creer que la lectura de los poemas de Benedetti, puesta a correr alrededor del mundo, haría retroceder a la muerte que le amenazaba. Mario perdió la batalla, nosotros, sus amigos, sus lectores, también. Restará la memoria, restarán los libros, pero, en este momento, memoria y libros casi nos parecen poco. El dolor y la tristeza no se aliviarán tan pronto. Estaba Mario Benedetti y dejó de estar".
Esto fue lo que escribió José Saramago en su blog, enseguida que supo de la muerte de su colega y amigo uruguayo, y en la que alude a una iniciativa que él mismo había lanzado el 4 de mayo, cuando se enteró que Benedetti volvía a ser internado en Montevideo. No sabía cuál era la respuesta adecuada a la noticia del agravamiento de salud que había tenido el autor de La tregua y Pilar, la esposa de Saramago, se encargó de proponerle una solución: hacer una cadena de lectura con los poemas del isabelino.
"Arranquemos sus poemas de la inmovilidad de la página y hagamos con ellos una nube de palabras, de sonidos, de música, que atraviesen el mar atlántico (las palabras, los sonidos, la música de Benedetti) y se detenga, como una orquesta protectora, delante de la ventana que está prohibido abrir, acunándole el sueño y haciéndolo sonreír al despertar. A los médicos algo se les debe, reconozcámoslo, pero nosotros, todos los que alrededor del mundo hemos dado nuestra contribución personal, juntando poemas de Benedetti a los poemas de Benedetti, también hemos tenido parte en el trabajo. Mario Benedetti está mejor. Leamos entonces un poema suyo".
Así terminaba su llamado a plegaria el portugués y premio Nobel, apelando a la fuerza genuina de la poesía como un remedio para el amigo herido. El gesto recorrió el mundo y fue un alerta que supo unirlo.
Jairo: "Un escritor que llegó a la gente"
"Cuando en Colombia, en España, en México, uno pasa por un kiosco de revistas y se encuentra con un póster con un poema de Benedetti, se da cuenta de cuán profundamente llegó a la gente este hombre", reflexionó Jairo, agregando: "Era una persona muy cálida. Era como su poesía y su literatura. Un hombre muy amado por los artistas, los escritores, los cantantes."
Zapatero: "Confianza en el ser humano"
"El fallecimiento de Benedetti nos deja como legado el testimonio de libertad esplendorosa y de confianza inquebrantable en el ser humano", sostuvo ayer el presidente del gobierno español Rodríguez Zapatero, en un telegrama que envió a los familiares del escritor. "Él consiguió que su voz sea la de muchos y que millones de personas nos hayamos reconocido en sus versos y en su lucha."
Peri Rossi: "Una comunicación directa"
"Mario representa la esperanza revolucionaria de América Latina, pero también la parte más oscura de los regímenes de izquierda", resumió la escritora hispano uruguaya, quien remarcó la importancia del escritor, "para los lectores de todo el mundo de habla hispana, y no sólo para América Latina. Ha tenido muchísimos lectores, porque se comunicaba de manera muy directa".
Un impacto repetido como eco
"El poeta del compromiso", titula el portal elpais.com. "El poeta resistente, que vivió el exilio y la enfermedad (un asma pertinaz, obsesiva) le fueron rompiendo, pero él se mantuvo siempre en defensa de la alegría".
"Muere el famoso escritor uruguayo Mario Benedetti", tituló el sitio cnn.com, remarcando el origen italiano de sus antepasados, y su apoyo incondicional a Fidel Castro: "Nunca oculté mis ideas políticas", había afirmado.
"Tabaré despidió a Benedetti: hombres como Mario nunca mueren", tituló Clarín.com, señalando que "fue uno de los grandes de la literatura latinoamericana, que con un estilo llano y profundo cautivó a varias generaciones".
El País Digital