La reingeniería del sistema nacional de vivienda es una de las reformas más importantes de la presente administración
El Director de la Agencia Nacional de Vivienda, Carlos Mendive, explicó el funcionamiento del brazo ejecutor de las políticas habitacionales, fundada durante el actual Gobierno. A partir de un Banco Hipotecario quebrado, dueño de la deuda pública más cara del Estado uruguayo, además de un Ministerio nuevo y con una frágil estructura, se construyó un nuevo sistema, subrayado por Mendive como una de las reformas más importantes de los últimos cuatro años.
Carlos Mendive explicó la gestación del sistema de vivienda para la novena edición de Informe Semanal. En primer lugar, señaló a la reingeniería del sistema como una condición necesaria para concretar políticas de largo aliento. El diagnóstico realizado en el año 2005 así lo marca, justificó.
Para Mendive, la concepción y gestión del sistema anterior falló. El Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente es una de las últimas secretarías de Estado creadas y en su estructura se identificaron carencias. Además, el Banco Hipotecario estaba financieramente quebrado. Afirmó que la deuda pública más cara del Estado uruguayo era propiedad del BHU.
Ante esta realidad, la nueva concepción de las políticas de vivienda se orientó hacia tres pilares básicos: un Ministerio de Vivienda que define la política pública en su materia, un brazo ejecutor en la Agencia Nacional de Viviendas y un Banco Hipotecario cuyo rol se concentra en las actividades de la banca pública. Antes, expuso, el BHU concentraba la construcción, el financiamiento y las políticas de subsidios a la vivienda, muchas tareas para un banco de estas características.
Como Director de la Agencia Nacional, Mendive detalló la operativa de la institución que dirige. La ANV construye, es decir, licita obras con los fondos provenientes del Ministerio de Vivienda y basados en los nuevos estándares definidos por la secretaría de Estado, atendiendo en especial, el concepto de construcción de nuevos complejos habitacionales y con una urbanización a escala humana.
También desembolsa los recursos necesarios para la construcción de cooperativas de vivienda. Este mecanismo fue reformado en esta administración para que los plazos sean menores. Mendive recordó que la formación, gestión y desarrollo de una cooperativa de viviendas tenía plazos muy extensos y es en este punto particular donde la ANV se concentra para acelerar los pasos.
Como ejemplo, informó que durante el mes de mayo se sortearán 300 viviendas a través del mecanismo cooperativo y otras 300 serán sorteadas en el mes de agosto. Además, la Agencia otorga préstamos y subsidios para la compra de viviendas nuevas o usadas, la gestión y comercialización de inmuebles desocupados y el desarrollo de nuevos instrumentos financieros.
La cartera social del Banco Hipotecario, aquellos complejos habitacionales económicos construidos en áreas periféricas de Montevideo o el Interior del país, pasó a manos de la Agencia de Vivienda. Junto a ella, la cartera comercial tóxica, con grandes deudas arrastradas desde hace muchos años atrás.
Carlos Mendive sostuvo que la institución que dirige maneja esta cartera de una forma muy diferente a la gestión bancaria. En números, recordó que son 35.000 viviendas entre las que se encuentran los complejos habitacionales más grandes que construyó el BHU, como el Complejo América o el barrio Euskal Erría, o los construidos junto a las Intendencias Municipales del país.
Con el trabajo de readecuación de las deudas se otorgó más certezas y mejores plazos para los habitantes de estos complejos, subrayó. La ANV y los habitantes acordaron que la deuda final no puede ser mayor al costo de la construcción de esa vivienda, tal como se constató en diversos casos presentados ante la Agencia, fruto de las diversas refinanciaciones dispuestas por el BHU. En este aspecto, continuamos la labor, dijo.
A la par de estas gestiones, la ANV administra 40 esqueletos urbanos y 500 terrenos sin edificar, que pondrá a disposición del público. Gracias a la asociación entre lo público y privado, Mendive desarrolló el concepto que la Agencia pretende alcanzar: la culminación de estas soluciones habitacionales de alto impacto urbano, en zonas con servicios para la comunidad y con reglas claras para las empresas constructoras.
La revitalización del barrio Goes, en Montevideo, es parte de esta ejecución. El edificio de la ex fábrica de "Alpargatas", un esqueleto urbano con varios años sin terminar, es el primer emprendimiento orientado a esa dirección. Estamos dispuestos a tomar riesgos financieros, dijo Mendive, pero el actor privado también debe arriesgarse.
Además de Montevideo, la ANV trabaja con la Intendencia de Maldonado, con la regularización de terrenos y 400 viviendas en ese departamento. También se regularizará el complejo Urbaneste, una obra que comenzó en los años ’70 con 100 viviendas en su contorno. Finalmente, se construirán 108 viviendas en San Carlos por parte de la Intendencia, con la ANV como constructor y recaudador del costo de las obras a los habitantes, que erogará lo recaudado a la Intendencia de Maldonado.
Para la última parte del programa, conoceremos la articulación entre tres organismos para atender proyectos en el interior del país. Gracias a MEVIR y la JUNAE, se creó un programa para fomentar el desarrollo sustentable y comunitario, con fuertes vínculos con el hábitat y con capacidad para fortalecer las redes locales. En forma específica, conoceremos la actividad de unos productores de quesos, quienes subrayan que el trabajo organizado y la actividad en conjunto es capaz de impulsar su actividad económica.
