A lo largo de la próxima semana (30de marzo -5 de abril)se lleva a cabo en Uruguay en Tercer Encuentro Mundial de los Consejos Consultivos y el último en el período de esta administración.
Los Consejos Consultivos nacieron a impulsos de la política de Vinculación del actual gobierno desde 2005 y tuvieron su reconocimiento legal en la Ley de Migraciones del 2008, “Artículo 74 :
Los Consejos Consultivos son organizaciones representativas de los
uruguayos residentes en el exterior cuyo cometido central será la
vinculación con el país en sus más diversas manifestaciones.
La organización y funcionamiento de los mismos se sustentará sobre la base de principios democráticos y la forma organizativa que establezca la reglamentación.
El Servicio Exterior de la República, a través de sus misiones
diplomáticas y oficinas consulares, los reconocerá como tales y brindara, dentro del ámbito de sus competencias, el apoyo que le sea requerido”.
En este Tercer Encuentro se discutirá sobre lo actuado y no, sobre una serie de planteamientos que llevan los Consejos y además una serie de instituciones que tienen que ver con la Patria Peregrina expondrán para conocimiento de sus proyectos y posibilidades para facilitar la integración del país con quienes estamos en el mundo.
Nuestro Consejo Consultivo de Uruguayos en Chile va a este Encuentro representado por Trinidad Algorta, Consejera electa al Directorio y con quien estaremos en contacto a lo largo de esta semana para recibir sus informaciones y transmitírselas a todos.
Cuales son nuestros planteamientos al Encuentro:
1.-Consideramos que la firma Apostilla de la Haya o los convenios bilaterales en el mismo sentido constituyen una demostración de buena voluntad, de reconocimiento de nuestro estado hacia el 15% de su población en situación de extraterritorialidad.
Para los Consejos Consultivos lo consideramos una obligación emanada de nuestra función: bregar por facilitar los trámites y bajar los costos sobre todo teniendo en cuenta la situación de las y los conciudadanos en situación más desfavorable.
La apostilla de la Haya o algo en el mismo sentido facilitaría y simplificaría los trámites, serían menos costosos, se harían más rápidos evitando todos los obstáculos que representan hoy.
Entendemos que la puesta en práctica exige los estudios técnicos y de ejecución necesarias.
Más allá de los aspectos de implementación, consideramos que por lo menos los trámites más importantes referidos a documentación personal, reconocimientos de estudios y de trabajo deberían estar cubiertos.
Si la apostilla no fuera viable consideramos un mínimo la implementación de sus términos y espíritu en convenios bilaterales al mínimo con los países en los que viven las colonias más grandes y con los países latinoamericanos.
2. Consideramos que la Reglamentación de los Consejos adolece de errores que no hacen lo suficientemente inclusiva la participación de los compatriotas en situación de irregularidad en países altamante represores de la inmigración y al respecto llevamos propuestas de modificación.
3. Llevamos como propuesta: la participación ciudadana en 2 instancias: la Junta Nacional de Migraciones (art. 24 de la ley de Migraciones) que no lo considera expresamente (pero pueden establecerse canales eficaces de participación) y el Consejo Consultivo asesor de migraciones (art. 26 de la ley 18.250) en que está prevista la participación de la sociedad civil.
4. Consideramos necesaria una política de estado planificada a largo plazo y con organismos que aseguren la continuidad, el desarrollo y evolución independientemente de los cambios que pudieran realizarse en los organismos del estado.
5. Saludamos los cambios de 2009 en la Dirección del DGCV y esperamos que la situación de este ultimo año de estancamiento se revierta y podamos continuar a desarrollar el proyecto de vinculación que tanto nos interesa a todos en una relación fluída y fructífera.