martes, 17 de agosto de 2010

Chile entregó restos de uruguaya presunta víctima de la dictadura

Se trata de Mónica Cristina Benaroyo, asesinada durante el período del dictador trasandino Augusto Pinochet

El gobierno de Chile entregó este lunes los restos de la uruguaya Mónica Cristina Benaroyo, asesinada presuntamente por la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) y cuyo cadáver fue hallado hace dos años momificado en un recinto militar, dijo una fuente diplomática.

"Se hizo la entrega de los restos a la presidenta de la Comisión por la Paz del Gobierno de Uruguay, María Soledad Cibils, que tiene la autorización de los familiares para llevárselos, y proceder el miércoles a la inhumación de los restos", informó el embajador de Uruguay en Chile, Juan Carlos Pita.

El diplomático y la funcionaria de ese país se reunieron con el viceministro de Relaciones Exteriores de Chile, Fernando Schmidt, a quien le agradecieron por la gestión realizada para la entrega del cadáver.

Los restos de Benaroyo fue encontrado el 16 de julio de 2008 en una zona desértica perteneciente a un recinto militar cerca de la ciudad chilena de Arica, 2.000 km al norte de Santiago.
En su momento, el Servicio Médico Legal de Chile informó que parte de los restos de la mujer -que se hallaban sin cabeza- se encontraban momificados debido a la salinidad del terreno del desierto chileno.

Esa condición permitió que se conservaran sus huellas digitales, posibilitando su identificación. Tenía 48 años al momento de su muerte.

Benarroyo, "hija de diplomáticos rumanos, se nacionalizó uruguaya en 1954. Era maestra de filosofía y había estado en Chile huyendo de los peligros del golpe de Estado en Uruguay", contó el embajador Pita.

"Había sido invitada a dar clases de filosofía a Cuba. (Mientras) estaba dando clases en Arica y hasta allí se conoce su historia. Luego se produjo el hallazgo", precisó.

Tras comprobarse la identidad, se inició un proceso judicial en Chile, dada su "muerte con sospecha de criminalidad", dijo el embajador, y añadió que hay otros ocho casos judiciales de compatriotas suyos desaparecidos o presuntamente asesinados durante la dictadura chilena.