MOMENTO EXCEPCIONAL
Uruguay es el segundo exportador de stock de lana a nivel internacional y líder en finuras medias y finas. Las mejoras en las majadas, la genética y el trabajo que se realiza durante la esquila incidieron en el aumento de la calidad y en las exportaciones que llegaron a U$S 330 millones. Nuestro país es el segundo exportador de stock lanar del mundo y el tercer de carne ovina, con un mercado caracterizado por altos precios.
En el lanzamiento de la zafra de la esquila de la lana en Cerro Largo, evento organizado por la Sociedad Agropecuaria del Departamento, el Presidente de la República, José Mujica, afirmó que la producción ovina ha demostrado ser una actividad que distribuye la renta.
No obstante, dijo que el sector se está quedando sin gente que se dedique al oficio, porque la crisis del precio de la lana fue extensa en el tiempo. El Mandatario, afirmó que el sector posee una excelente perspectiva a nivel nacional e internacional, función que suma elementos positivos a las cadenas productivas.
En el evento, el ingeniero Eduardo Prieto representó a la industria lanera del Uruguay. Dijo que el rubro exportó entre lana, carne ovina, cuero y grasa de lana U$S 330 millones. En tal sentido, afirmó que el sector atraviesa un momento excepcional, situación que también refleja la poca oferta de lana que existe en el mundo.
Afirmó que la producción lanera disminuyó en forma significativa en Australia, Nueva Zelanda y también en nuestro país. De esta forma, la lana se transformó en un insumo que se orienta a los segmentos de consumo de mayor poder adquisitivo.
Subrayó que existe una demanda muy importante por parte de China, que ha liderado y ha sido la locomotora de la recuperación económica luego de la crisis económica internacional. Prieto aseguró que China compró el 80% de la zafra australiana y el 60% de la zafra uruguaya.
El segundo mercado comprador de Uruguay es Europa, continente que está saliendo en forma lenta de la crisis internacional, factor que es importante para la venta de lanas finas.
Prieto enfatizó que Uruguay esta muy bien posicionado en el mercado mundial de lanas. Subrayó que el país es líder en lanas de finuras medias y finas. De esta forma, las lanas nacionales comenzaron a desplazar a las australianas porque aumentó la calidad de las exportaciones nacionales.
El ingeniero expresó que la calidad es un elemento central para poder competir en el mundo. Explicó que la calidad comienza con las majadas, la genética, y el trabajo que se realiza durante la esquila. En tal sentido, manifestó que el trabajo del Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL), en relación a los planes de acondicionamiento y con las grifas está avanzando, siendo necesarias la implementación de más ventajas impositivas con la finalidad de avanzar en la temática.
El representante del sector lanero, dijo que los exportadores uruguayos tienen un prestigio a nivel mundial porque mantienen un estricto cumplimiento de las condiciones pautadas para la totalidad de los negocios realizados.
Destacó que la industria uruguaya cuenta con la mejor calidad y las mejores máquinas del mundo. Enfatizo que Uruguay es el segundo exportador de stock de lana del mundo detrás de China, y ha tenido a nivel mundial una condición de privilegio durante décadas.
El especialista agregó que a la óptima posición de la lana se le suma el momento excepcional de las carnes ovinas. Precisó que los precios que tiene la carne ovina no se conocían en toda la historia del país. Según Prieto, la situación es producto de la gran caída de la oferta de carne de oveja en Australia y Nueva Zelanda. Ambos países son los principales exportadores del mundo, seguidos en tercer lugar por Uruguay.
En su alocución también expresó que el ganado ovino transforma el pasto en carne con mucho más eficiencia que el vacuno. Destacó que a la situación se suma la mejora en los precios internacionales, instancia que indica que el área es el rubro más estable de la ganadería uruguaya.
Otras de las ventajas citadas por el especialista indican que los ovinos se adaptan mejor a los suelos más pobres del país. Asimismo, este ganado es más fácil de criar por los pequeños productores, siendo el rubro que mayor se adapta a los cultivos forrajeros, que es preciso sembrar entre los cultivos agrícolas si se quiere conservar el suelo.
