Por Lucio D. Dalía (*)
La megaobra, postergada por más de medio siglo, tiene un interés geoestratégico pero falta definir su integración con la infraestructura ya existente y su impacto ambiental
Sin importar los motivos que llevaron a ello, no hay dudas de que la decisión del Gobierno Uruguayo de construir un Puerto de Aguas Profundas constituye una medida adoptada en función de una visión geoestratégica- gestión estratégica de los intereses geopolíticos- y, en virtud de ello, deberá tomar todos los recaudos para concretar este emprendimiento, tan anhelado desde hace medio siglo. Para Uruguay esta obra está llamada a constituir un dinamizador de su economía y un posicionamiento de singular importancia en la Región.
El siglo XXI se caracteriza por una nueva era geopolítica, en la cual los polos de poder complementan entre sí sus dimensiones geopolíticas, con la finalidad de obtener sus objetivos en condiciones óptimas. Es así que se han formado distintas alianzas, entre las que se destaca el BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) conformando una realidad geopolítica de singulares características. En función de esta realidad, Brasil ha adquirido una importancia e incidencia en el Continente que lleva en los hechos a que Sudamérica esté llamada a interactuar en el nuevo orden estratégico multipolar.
Es un hecho que una bonanza económica como la actual propicia la disminución de los problemas y su ocultamiento, pero no hace que los mismos desaparezcan.Uruguay está desde hace algunos años en crecimiento por encima de sus posibilidades, gastando más de lo que aumentan sus ingresos, por ende se hace imperativo el invertir en infraestructura que le posibilite la capacidad de fortalecer y potenciar su economía.
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El Gobierno Uruguayo ha decidido construir un Puerto de Aguas Profundas (PAP),concebido como comercial y multipropósito; ha definido el lugar en la región “El Palenque” (Departamento de Rocha) a 10 km al este de La Pedrera y a menos de 30 km de Cabo Polonio. Esta región tiene condiciones naturales excelentes debido a un calado natural de 20 metros. Y no requeriría grandes costos de mantenimiento, lo que lo ubica como un punto importante de recalada para los barcos que navegan en esta región. El PAP será público; diseñado, financiado, construido y operado por el sector privado. Se prevén dos modalidades de Contrato, en Concesión (Ley de Concesión), o de Participación Público-Privada (Ley de PPP). El derecho de operación será de un plazo no inferior a 30 años.
Algunas consideraciones:
- El trazado de los Corredores Bioceánicos, no contempla las vías de comunicación de Uruguay, por ende sería necesario planificar de qué forma se puede desarrollar infraestructura para conectarse con el Corredor más próximo, Buenos Aires-Valparaíso.
- Será un puerto oceánico concentrador y distribuidor- Puerto “HUB”- conectado a los puertos de las hidrovias Paraná-Paraguay y Uruguay, del Sistema Portuario “Rosario al Mar”, además de los de Buenos Aires, La Plata, Nueva Palmira y Montevideo.
- La ubicación del PAP, cuenta con acceso a un sistema de carreteras de 2º orden, distante de las carreteras que conducen a la interconexión con Argentina y muy próxima la frontera con Brasil. En cuanto al ferrocarril, el ramal cercano está fuera de servicio y muy deteriorado.
- Brasil ha iniciado un ambicioso Plan de Inversiones en carreteras y ferrocarriles, con participación de la inversión privada, pero los trazados concesionados no llegan a contemplar las cercanías del emplazamiento del PAP.
- Se ha anunciado la construcción de una nueva Planta de Celulosa, que se ubicaría, en el Departamento de Cerro Largo. Razones de cercanía geográfica, indicarían que se utilizará este PAP para la salida internacional de su producción.
- El Ejecutivo Uruguayo acordó, con la Minera Aratirí, que el Mineroducto proyectado para la salida de su producción al exterior, se realice por este PAP.
Los estudios realizados institucionalmente, abordaron el “desarrollo económico de la Región y de Uruguay (producción minera, de madera, granos y Terminal Energética)”y una serie de variables acordes a la temática portuaria y de navegación. Quedan por analizar múltiples factores y, sobre todo, el impacto medioambiental de este emprendimiento.
Hasta ahora, estaría casi todo previsto, perosólo se está estudiando la obra en sí, cómo diseñarla y ponerla a funcionar, así como su financiación. Para que una obra de esta envergadura, se desarrolle adecuadamente, es necesario prever todo lo que debe interactuar con este PAP, para que cumpla con su cometido. Creemos de suma importancia planificar cómo se integrará este PAP con la infraestructura existente y qué debe hacer el Estado Uruguayo para lograr que esta Megaobra logre su “alto impacto positivo a nivel geopolítico y en la estructura productiva, económica y social”
Desde nuestra óptica visualizamos:
- Rediseño y construcción integral de la Ruta No 14 (La Coronilla-Mercedes).
- Construcción y mejoras en las Rutas Nos.13-15 (Lascano-La Paloma) y Rutas Nos. 10-9(La Paloma-Chuy).
- Construcción de una vía férrea desde el PAP hasta la Ciudad de José Pedro Varela (Lavalleja), además del acondicionamiento del Ramal José Pedro Varela - Rio Branco (Cerro Largo).
Este acondicionamiento en infraestructura es lo mínimo a prever. Evidentemente tiene un altísimo costo, pero lamentablemente no está previsto.
Entendemos que se trata de una Megaobra que puede potenciar la economía de Uruguay, pero deben adoptarse todas las previsiones para que sea una ecuación económica con muchas franquicias y para que sea atrayente el puerto. En definitiva, el éxito va a depender de la eficacia integral de este Puerto de Aguas Profundas.
(*) Master en Estrategia Nacional
