Construir es caro, ineficiente y hasta se podría decir que insostenible desde el punto de vista ambiental. Partiendo de esta premisa, la Intendencia Municipal de Montevideo (IMM) otorga hasta siete años de exoneración en la contribución inmobiliaria para las obras nuevas que incluyan materiales ecológicos y medidas bioclimáticas y que racionalicen procedimientos de construcción. Estas viviendas no pagarán el tributo y, a la larga, consumirán menos energía, y contribuirán a mejorar la calidad de vida en la ciudad
El modelo de Sustentabilidad Ambiental en la Vivienda (Suamvi) presentado ayer reglamenta un decreto de la Junta Departamental de Montevideo que exonera el pago de la contribución inmobiliaria por el plazo de 36 meses a las construcciones residenciales que incluyan prácticas ambientales. Al beneficio pueden sumarse otros 48 meses si las obras nuevas se ubican en el entorno de la bahía, en el eje de Luis Alberto de Herrera y José Batlle y Ordóñez, Barrio Sur, Centro y arroyo Miguelete, las actuales áreas de promoción definidas por el Plan de Ordenamiento Territorial.
Marianela Elizalde, integrante del Grupo de Trabajo de Sustentabilidad Ambiental de la IMM, explicó a El Observador que el manual no establece mínimos aceptables para conseguir el beneficio tributario, pero que sí estarán incluidos en la revisión del modelo previsto para el año 2014.
El modelo Suamvi pretende pintar de verde la ciudad a través del estímulo económico para la incorporación de tecnología sustentable en siete áreas: implementación de la obra, materiales, agua, aire, energía, residuos y gestión de obras. La incorporación de buenas prácticas ambientales en cada categoría suma puntos hasta 1.000 para la certificación.
Por ejemplo, el proyecto recibe 200 puntos si en la construcción se utilizan materiales reciclados en al menos tres rubros. Esto apunta a reducir el consumo de materias primas, minimiza las emisiones de gases de efecto invernadero y reduce la generación de residuos.
Otro elemento que puntúa es la reutilización del agua de lluvia para disminuir el consumo de agua potable en inodoros, lavado de pisos, o riego de las áreas verdes. Si la residencia alcanza a cubrir el 50% de sus necesidades con agua de lluvia se le otorga 20 puntos.
Otros 150 puntos se ganan por la incorporación de un método de calefacción por captación solar, denominado muro Trombé. La radiación solar pasa a través de una superficie de vidrio y calienta su interior, consiguiéndose temperaturas superiores a 60 ºC. También permite reducir la emisión de gases. Pero pueden sumarse otros 250 puntos si se cubre el 60% del consumo con un sistema de energía solar para el calentamiento del agua.
Desde el punto de vista técnico, la construcción sustentable incluye un sobrecosto, pero se repaga con creces con el ahorro energético.
fuente: http://www.entornointeligente.com/articulo/1321049/URUGUAY-IMM-exonerara-contribucion-a-viviendas-que-sean-sustentables