sábado, 27 de octubre de 2012

Uruguay debe exportar materias primas con mayor valor agregado



ECONOMÍA 

Visión. La planteó el economista de la Universidad de Harvard, Sachs


PABLO BESÓN
Uruguay podrá posicionarse de muy buena forma, en un contexto global demandante de alimentos, si aumenta su inversión en educación, investigación y tecnología, sostuvo el economista Jeffrey Sachs de la Universidad de Harvard.
El economista que, entre otras tareas, dirige el Proyecto del Milenio de las Naciones Unidas y es asesor especial del secretario de Naciones Unidas, Ban ki-Moon, destacó la buena situación por la que pasa Uruguay y sus posibilidades de adaptarse al cambiante contexto internacional. Sachs brindó su visión hemisférica sobre "la economía verde. A dónde va el mundo?", en el marco de una video conferencia que cerró el 9° Ciclo de Conferencias "Políticas de Estado. El agro en los tiempos que vienen", organizada por Diario El País, Consultora Seragro y el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura.
El experto indicó que la Unión Europa y Estados Unidos -tradicionales importadores de materias primas-, pasan por cambios estructurales difíciles de resolver. A esto se suman los problemas económicos por los que están pasando y una globalización en la cual países emergentes cuentan con mejores oportunidades para hacer saltos tecnológicos, sumado a que cuentan una mano de obra más barata.
En ese contexto el economista, que asesora a varios gobiernos de Latinoamérica, Europa del Este, Asia y África, destacó que Uruguay tiene "condiciones muy favorables" como el hecho de ser un país pequeño, pero a la vez un relevante productor y exportador de alimentos, con un clima templado y un buen acceso al agua.

Por otro lado, sostuvo entre sus debilidades que básicamente "no exporta materias primas con demasiado valor agregado, al tiempo que la inversión, con relación a otras naciones, es baja en educación, investigación y tecnología".
Desde la óptica de Sachs, mejorar estos problemas y estrechar vínculos comerciales con países asiáticos que vienen emergiendo como potenciales compradores de alimentos a gran escala, será clave para que Uruguay pueda posicionarse de buena forma.
CLAVE. Por su parte, Walter Baethgen, director del Programa Regional para América Latina y el Caribe del Instituto Internacional de Investigación en Clima y Sociedad (IRI), sostuvo que la adaptación a los problemas climáticos que se experimenta en el presente es clave para el país.
"Impacta que más del 70% del área de Uruguay sigue siendo campo natural. En un mundo donde cada vez hay más gente dispuesta a pagar precios mayores por un producto que se obtiene de forma natural, esto es un plus muy importante. Se busca de forma creciente mercados que aseguren que lo que se consume no tiene hormonas. Esto da al país una importante oportunidad en mercados con estas exigencias", sostuvo el experto.
El proyecto denominado "Desarrollo y Adaptación al Cambio Climático", que viene llevando adelante el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, fue calificado como "revolucionario" por Baethgen. "El mismo puede revolucionar el trabajo del cambio climático en el mundo. Hoy este tema está de moda y por tanto existen miles de millones de dólares dedicados a ver cómo reducir la emisión de gases que causan estos cambios, así como para adaptarse al mismo. En este proyecto el 99% de los esfuerzos están orientados a solucionar problemas como el mejor acceso y utilización del agua para los productores, así como mantener la biodiversidad del campo natural", indicó.
La aplicación eficaz y extendida de un sistema nacional de información agropecuaria que permita facilitar decisiones, políticas públicas y la rápida respuesta ante fenómenos climáticos adversos, también es considerada clave para el investigador uruguayo.
INMADURA. Santiago Arana, asesor privado que trabaja fundamentalmente con empresas de granos -el otro panelista invitado- especializado en proyectos de riego, sostuvo que el aprovechamiento del agua y la eficiencia productiva, son la clave para mejorar la producción agropecuaria. "La dimensión ambiental de la agricultura uruguaya debe venir de la mano de la económica. Si somos eficientes produciendo a nivel interno, tenemos una muy buena oportunidad", afirmó.
Arana afirmó que uno de los mayores escollos es que la agricultura existente en Uruguay es "inmadura", dado que creció de forma explosiva debido al impulso de productores argentinos, expandiéndose y colonizando tierras para esta práctica.
"En otros lugares existe uniformidad en sistemas productivos, que hace que se tengan resultados muy confiables y poco variables. Nosotros tenemos un debe en encontrar esos sistemas que nos aseguren mayor productividad y estabilidad", indicó. Arana también defendió la conveniencia de apostar cada vez más al riego.
El País Digital