“Uruguay no es inmune a los efectos de la crisis internacional (aunque) se ha preparado bastante bien para enfrentarla”, analizó en entrevista con Ultimas Noticias el director residente del Banco Mundial (MB) en Uruguay, Peter Siegenthaler.
El funcionario opina que hay terrenos para avanzar y “mejorar la eficiencia de las políticas sociales” que dan cobertura a los sectores más desprotegidos de la población, que son quienes están más expuestos a un mayor impacto de la crisis internacional que por estas horas estremece a Europa, y que amenaza con extenderse a escala global si no se logran los acuerdos necesarios en el sur del Viejo Continente.
Incluso trazó un panorama “muy oscuro” si Asia no logra compensar con su crecimiento la depresión en los mercados mundiales. “Ello restringiría la demanda y tendría impacto sobre la producción de los países como Uruguay”, dijo el jerarca del BM, tras señalar que también habría dificultades para acceder a los mercados de crédito.
Siegenthaler elogió las gestiones del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) en relación a la gestión de créditos de contingencia y a la política de prefinanciamiento que desarrolló el Poder Ejecutivo, pero advirtió que la alta dolarización de la deuda sigue siendo un factor de exposición a mayores riesgos.
Según el último reporte de la Unidad de Gestión de Deuda Pública del MEF, el 42% de lo que Uruguay debe a sus acreedores está en moneda nacional, un valor menor al de años atrás, pero aún por encima de las expectativas del gobierno, que se fijó una meta de 55% de la deuda en dólares para el cierre del año.
“La visión de Uruguay ha sido ejemplar, de largo plazo”, opinó el jerarca del organismo sobre los créditos de contingencia gestionados y aprobados por su organismo, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la CAF-Banco de Desarrollo y el Fondo Latinoamericano de Reservas (Flar), pero advirtió como vulnerabilidad latente que la relación de la deuda en dólares “sigue siendo alta en Uruguay”. Recordó que una eventual mayor asistencia de contingencia permanece en estudio.
Sieghentaler trazó también un panorama de preocupación e incertidumbre ante la evolución de la crisis internacional. Expresó que mientras en Estados Unidos la atención de las autoridades se enfoca en cómo salir de una fase de “menor dinamismo” en la economía, en Europa los problemas son “de largo plazo” y generan fricciones y choques políticos entre los países que aún no acuerdan unánimemente un camino de salida para las economías más golpeadas.
Fuente: Ultimas Noticias Uruguay
