viernes, 10 de septiembre de 2010

CAPACITACIÓN, COORDINACIÓN Y COMUNICACIÓN SON PILARES DE ACCIÓN ANTE SITUACIONES DE CRISIS


Durante los días 2 y 3 de setiembre se desarrollará un Taller destinado a la prevención de pandemias. Apunta a la coordinación entre las instituciones relacionadas en forma directa con la temática y se propone entrenar e informar en comunicación de riesgo. El encuentro busca contar con un grupo de responsables técnicos y políticos encargados de llevar adelante la comunicación con la población en tiempo y forma

Las jornadas de trabajo se llevarán a cabo en el Hotel NH Columbia en tanto que la ceremonia de apertura se realizará el 2 de setiembre a las 9:30 horas, en la Torre Ejecutiva y estará a cargo del Prosecretario de la Presidencia de la República, Diego Cánepa y del Representante de OPS en Uruguay, Eduardo Levcovitz. En el contexto sudamericano nuestro país se destaca por el abordaje coordinado de esta temática entre los potenciales actores implicados en un suceso de esta naturaleza. Ante una pandemia de cualquier entidad se torna necesario el trabajo mancomunado de todos los organismos del Estado y entidades locales.

El Especialista en Comunicación y Medios de la Organización Panamericana de la Salud, Gustavo Delgado recordó que en el año 2007 con el apoyo de esta Organización, Uruguay realizó cuatro talleres subregionales, los que culminaron con uno nacional en Montevideo. En dichas instancias se procedió a unificar un plan nacional de preparación ante una situación de contingencia. Añadió que luego el país debió afrontar la pandemia de H1N1 y respondió de forma adecuada, sobre la base de un plan articulado. Delgado explicitó que cuando se habla de pandemia, se hace referencia a crisis vinculadas con la salud, originadas generalmente fuera del país y afectan a la globalidad o a un conjunto de países y a sus poblaciones. Y citó como ejemplo de pandemia, la de H1N1 que se inició en el Norte de América y luego se extendió a numerosas naciones.

Añadió que si bien no se denomina pandemia, sí se puede determinar como objeto de análisis y aplicación de un plan de este tipo, a todo aquel desastre natural que conlleve al trabajo de instituciones públicas, privadas y a la población en su conjunto. Indicó que las mismas herramientas comunicacionales son igualmente aplicables ante una situación de desastre natural o contingencia.

El Especialista en Comunicación y Medios de la OPS, dijo que el Taller está destinado a autoridades de nivel alto y medio y a referentes de los Comités de Emergencia Departamentales, Directores Departamentales de Salud y Referentes Departamentales de Vigilancia Epidemiológica en Salud del MSP y Responsables de la Vigilancia Epidemiológica de Sanidad Animal del MGAP.

Delgado resumió que la capacitación, la coordinación y la comunicación, son los pilares en los que se apoya una buena estrategia de manejo ante una situación de crisis. La intención que debe primar es la transparencia, el traslado fehaciente a la población de lo que acontece, el mantenimiento de una vocería que mantenga una línea de comunicación que posibilite una llegada clara y armónica y que no permita la filtración de fuentes alternativas que alteren o ensucien los mensajes.

Pandemias en el Siglo XXI - Manejo de la comunicación de riesgo

Bajo este título se desarrollará los días 2 y 3 de setiembre un Taller cuyo objetivo apunta a dinamizar las acciones de información, comunicación y movilización social, destinadas al apoyo de acciones frente a una situación de riesgo sanitario o ambiental que afecten la salud humana o animal y generen perjuicios a la calidad de vida de la población.

Actores del ámbito local compartirán, analizarán y debatirán acerca de experiencias en las que la comunicación juega un importante rol. Estas jornadas serán propicias para contribuir a la formación de más actores de las distintas organizaciones en la comunicación de eventos de contexto crítico y para facilitar las acciones in situ. Este espacio oficiará de generador de una comunicación transversal entre los distintos actores locales, que redundará en el conocimiento interinstitucional para facilitar el desarrollo de las distintas tareas ante la necesidad del esfuerzo conjunto.

El objetivo comunicacional consiste en el relacionamiento con los distintos públicos objetivos de forma rápida, oportuna y precisa para construir y mantener la confianza en las acciones de las autoridades responsables en respuesta a la epidemia. También para influenciar en la incorporación de comportamientos individuales y colectivos que cooperen en el control más rápido de la pandemia o contingencia. Otro de los cometidos, es la apuesta a la construcción de coordinaciones previas y la conformación anticipada de grupos de trabajo entre distintas dependencias del Estado directamente involucradas en el tema y con capacidad de decisión. También con los actores de la cadena productiva y los comerciantes y fundamentalmente con la sociedad civil.

Delgado destacó que es menester lograr una comunicación en tiempo y forma con la población. En este sentido, todos los esfuerzos destinados a la opinión pública beneficiarán el control de la epidemia o manejo de la crisis y la reducción de daños, a la vez de atenuar los perjuicios económicos que cualquier evento crítico acarrea. Asimismo se debe apelar a la coordinación activa de las áreas de comunicación de los diversos organismos oficiales como forma de contribuir a que el plan difusión se torne más eficiente y su puesta en práctica se realice en forma coordinada e integre a la mayor cantidad de actores públicos.

Realidad nacional

Desde el año 2008 Uruguay cuenta con un Manual de Comunicación Nacional Ante una Pandemia de Influenza, producto del esfuerzo interinstitucional desarrollado por la Presidencia de la República, el Sistema Nacional de Emergencias (SNE), el Ministerio de Salud Pública, Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca y la Organización Panamericana de la Salud (OPS/OMS) El escrito toma como base los planes de contingencia preparados especialmente sobre esta temática por técnicos del MGAP y MSP; la coordinación y experiencia por parte del Sistema Nacional de Emergencias ante situaciones de emergencia o desastre a efectos de instruir a los distintos Comités Departamentales integrados por los gobiernos locales.

Cabe destacar que casos concretos de epidemias de influenza o brotes de aftosa poseen el agravante de la urgencia con que las decisiones y acciones deben ser tomadas y el escenario pandémico acrecienta la necesidad de considerar la relación entre países y el papel de los diferentes medios de comunicación, locales e internacionales.