Lunes 19 de noviembre de 2012
NACIÓN LATINOAMERICANA HA RECIBIDO A COMPAÑÍAS DE MÁS DE 30 PAÍSES DE TODO EL MUNDO
La llegada de Enjoy, que controlará el Hotel Conrad, es parte de una tendencia que había estado protagonizada por empresarios argentinos y brasileños.
El Observador, Uruguay.
El deseo de poner pie en el terreno fértil que supone Uruguay para muchos inversionistas se está extendiendo en la región. A los grandes emprendimientos que han arribado al país en los últimos años desde Argentina y Brasil, ahora se están sumando en una corriente menos habitual fuertes iniciativas provenientes de Chile y Colombia.
Uruguay ha recibido a empresas de más de 30 países de todo el mundo, principalmente de los dos grandes vecinos. Pero el protagonismo inversor actual lo están marcando firmas provenientes de las costas del Pacífico. Así sucedió la semana pasada con el grupo chileno Enjoy, que adquirió el 45% del Hotel y Casino Conrad de Punta del Este a cambio de US$ 139,52 millones, con la opción de comprar el otro 55% en tres a cinco años. Enjoy llegó a un acuerdo con una filial del Caesars Entertainment para obtener el control operativo del hotel al adquirir ese paquete accionario de Baluma , la firma propietaria del hotel y de la licencia de juego hasta 2036.
Esta movida chilena se asemeja a otra realizada en septiembre por CCU, el mayor productor cervecero de Chile y el segundo de Argentina. Esa empresa compró Nix y Nativa y pasará a controlar algo más de 10% del mercado local de aguas minerales y gaseosas del mercado uruguayo. El monto de la operación no se dio a conocer.
A su vez, hay capitales chilenos en uno de los mayores emprendimientos que ha tenido el país. La empresa chilena Arauco tiene su parte en la planta de procesamiento de pulpa de celulosa Montes del Plata que se levanta en Conchillas, en el departamento de Colonia, que estará a cargo de una sociedad sueco-finlandesa-chilena.
Montes del Plata invertirá US$ 1.900 millones en una fábrica que prevé el procesamiento de 1,3 millón de toneladas de celulosa cada año y en la construcción de un puerto y una planta de energía.
Las compañías colombianas son otras que han ingresado con fuerza en Uruguay. El Grupo de Inversiones Suramericana (Sura) compró a fines del año pasado el paquete accionario del conglomerado holandés ING en pensiones, fondos de inversión y seguros en Uruguay y de otras cuatro naciones latinoamericanos. Sura adquirió ese paquete por US$ 3.614 millones, la mayor transacción llevada a cabo por una firma latinoamericana.
En mayo pasado, en tanto, el banco HSBC confirmó la venta de sus operaciones en Uruguay, Colombia, Perú y Paraguay por US$ 400 millones al grupo colombiano Gilinski, que adquirió los negocios del banco inglés en la región a través del Banco GNB Sudameris.
Colombia también está representada -aunque ahora en menor medida- en la Unidad Coronaria Móvil (UCM), que pasó a pertenecer en 2006 al grupo colombiano EMI Holdings Management SA. La firma danesa Falck, que cuenta con una centenaria tradición en atención de emergencias a nivel mundial, se hizo este año con el 63,1% del grupo EMI que tiene 800 mil socios y más de 3.200 empleados en la región, con presencia en más de 25 países de todos los continentes.
Agro argentino, carne brasileña
La atracción que Uruguay genera en los inversionistas extranjeros se basa en que en el país encuentran seguridad jurídica, buen nivel en la mano de obra, libertad económica y una relativa buena calidad de vida. Al punto que desde hace pocos años las empresas extranjeras controlan la mitad de las exportaciones locales. Iniciativas provenientes de Argentina, Brasil, Inglaterra, España y Bélgica representan casi la mitad de esas inversiones en el país.
Ese buen clima para apostar por Uruguay siempre lo tuvieron en cuenta muchas compañías argentinas y brasileñas, que a mediados de la década pasada profundizaron los vínculos con el vecino pequeño. En 2011 representaron el 23% y el 9% de la inversión extranjera directa, respectivamente, según información de Uruguay XXI. Grandes emprendimientos de esos países se muestran florecientes hoy en día en territorio uruguayo.
Es el caso del argentino El Tejar, líder en producción y exportación en el rubro ganadero y agropecuario. Instalado en 2002 en Uruguay, El Tejar cuenta en el país con 140 mil hectáreas, donde trabaja diferentes cultivos como trigo, cebada, soja, maíz y sorgo. Mueve por año unas 650 mil toneladas de granos.
Agronegocios del Plata (ADP) es otra iniciativa argentina –que involucra a Gustavo Grobocopatel, conocido en Argentina como “el zar de la soja”– en combinación con capitales uruguayos que hace punta en la agricultura con 100 mil hectáreas. Lo mismo para Agroland, una empresa agroindustrial que hinca el diente en la forestación, ganadería, en la producción vitivinícola y olivícola que pertenece al multimillonario Alejandro Bulgheroni. Las compañías de Argentina también han apostado fuerte en el ámbito inmobiliario y hotelero.
Si los argentinos se enfocan en los granos, los brasileños, en cambio, llegaron por la carne y los cereales. Las empresas de Brasil acaparan en este momento el 36% del mercado cárnico uruguayo. Se destaca el grupo Marfrig que cuenta con cinco plantas frigoríficas en Uruguay: Establecimientos Colonia, Frigorífico Tacuarembó, Frigorífico La Caballada, Inaler y Elbio Pérez Rodríguez. Acapara el 28,47% del total que se exporta a Europa mediante la cuota Hilton. Cater Group (Frigoríficos Carrasco y Las Moras); el Grupo Minerva (que adquirió Carnes Ana Paula y el Frigorífico PUL SA) y JBS –antes Berlín– (Frigorífico Canelones) son otros tres grupos brasileños instalados en el país en el mismo rubro.
Brasil tiene presencia además en el sector arrocero –Camil Alimentos compró Saman en 2007 por US$ 160 millones–, en el de la cerveza –el grupo AB InBev12–, en la industria química –Ultrapar Participações, que este año adquirió a través de su firma Oxiteno al mayor exportador local de productos químicos, American Chemical–, en la industria del plástico –LEB– y, próximamente, en la de los lácteos con la llegada de Laticínios Bom Gosto a San José. Prevén una inversión de US$ 30 millones.
También están presentes en el sector financiero a través del brasileño Banco Itaú.
Esta movida chilena se asemeja a otra realizada en septiembre por CCU, el mayor productor cervecero de Chile y el segundo de Argentina. Esa empresa compró Nix y Nativa y pasará a controlar algo más de 10% del mercado local de aguas minerales y gaseosas del mercado uruguayo. El monto de la operación no se dio a conocer.
A su vez, hay capitales chilenos en uno de los mayores emprendimientos que ha tenido el país. La empresa chilena Arauco tiene su parte en la planta de procesamiento de pulpa de celulosa Montes del Plata que se levanta en Conchillas, en el departamento de Colonia, que estará a cargo de una sociedad sueco-finlandesa-chilena.
Montes del Plata invertirá US$ 1.900 millones en una fábrica que prevé el procesamiento de 1,3 millón de toneladas de celulosa cada año y en la construcción de un puerto y una planta de energía.
Las compañías colombianas son otras que han ingresado con fuerza en Uruguay. El Grupo de Inversiones Suramericana (Sura) compró a fines del año pasado el paquete accionario del conglomerado holandés ING en pensiones, fondos de inversión y seguros en Uruguay y de otras cuatro naciones latinoamericanos. Sura adquirió ese paquete por US$ 3.614 millones, la mayor transacción llevada a cabo por una firma latinoamericana.
En mayo pasado, en tanto, el banco HSBC confirmó la venta de sus operaciones en Uruguay, Colombia, Perú y Paraguay por US$ 400 millones al grupo colombiano Gilinski, que adquirió los negocios del banco inglés en la región a través del Banco GNB Sudameris.
Colombia también está representada -aunque ahora en menor medida- en la Unidad Coronaria Móvil (UCM), que pasó a pertenecer en 2006 al grupo colombiano EMI Holdings Management SA. La firma danesa Falck, que cuenta con una centenaria tradición en atención de emergencias a nivel mundial, se hizo este año con el 63,1% del grupo EMI que tiene 800 mil socios y más de 3.200 empleados en la región, con presencia en más de 25 países de todos los continentes.
Agro argentino, carne brasileña
La atracción que Uruguay genera en los inversionistas extranjeros se basa en que en el país encuentran seguridad jurídica, buen nivel en la mano de obra, libertad económica y una relativa buena calidad de vida. Al punto que desde hace pocos años las empresas extranjeras controlan la mitad de las exportaciones locales. Iniciativas provenientes de Argentina, Brasil, Inglaterra, España y Bélgica representan casi la mitad de esas inversiones en el país.
Ese buen clima para apostar por Uruguay siempre lo tuvieron en cuenta muchas compañías argentinas y brasileñas, que a mediados de la década pasada profundizaron los vínculos con el vecino pequeño. En 2011 representaron el 23% y el 9% de la inversión extranjera directa, respectivamente, según información de Uruguay XXI. Grandes emprendimientos de esos países se muestran florecientes hoy en día en territorio uruguayo.
Es el caso del argentino El Tejar, líder en producción y exportación en el rubro ganadero y agropecuario. Instalado en 2002 en Uruguay, El Tejar cuenta en el país con 140 mil hectáreas, donde trabaja diferentes cultivos como trigo, cebada, soja, maíz y sorgo. Mueve por año unas 650 mil toneladas de granos.
Agronegocios del Plata (ADP) es otra iniciativa argentina –que involucra a Gustavo Grobocopatel, conocido en Argentina como “el zar de la soja”– en combinación con capitales uruguayos que hace punta en la agricultura con 100 mil hectáreas. Lo mismo para Agroland, una empresa agroindustrial que hinca el diente en la forestación, ganadería, en la producción vitivinícola y olivícola que pertenece al multimillonario Alejandro Bulgheroni. Las compañías de Argentina también han apostado fuerte en el ámbito inmobiliario y hotelero.
Si los argentinos se enfocan en los granos, los brasileños, en cambio, llegaron por la carne y los cereales. Las empresas de Brasil acaparan en este momento el 36% del mercado cárnico uruguayo. Se destaca el grupo Marfrig que cuenta con cinco plantas frigoríficas en Uruguay: Establecimientos Colonia, Frigorífico Tacuarembó, Frigorífico La Caballada, Inaler y Elbio Pérez Rodríguez. Acapara el 28,47% del total que se exporta a Europa mediante la cuota Hilton. Cater Group (Frigoríficos Carrasco y Las Moras); el Grupo Minerva (que adquirió Carnes Ana Paula y el Frigorífico PUL SA) y JBS –antes Berlín– (Frigorífico Canelones) son otros tres grupos brasileños instalados en el país en el mismo rubro.
Brasil tiene presencia además en el sector arrocero –Camil Alimentos compró Saman en 2007 por US$ 160 millones–, en el de la cerveza –el grupo AB InBev12–, en la industria química –Ultrapar Participações, que este año adquirió a través de su firma Oxiteno al mayor exportador local de productos químicos, American Chemical–, en la industria del plástico –LEB– y, próximamente, en la de los lácteos con la llegada de Laticínios Bom Gosto a San José. Prevén una inversión de US$ 30 millones.
También están presentes en el sector financiero a través del brasileño Banco Itaú.
Fuentes:http://www.df.cl/nuevas-inversiones-empresas-de-paises-del-pacifico-avanzan-en-el-mercado-uruguayo/prontus_df/2012-11-16/191307.html